La llegada de las fiestas navideñas siempre se espera con ganas. Son tiempos de estar en familia, a la que solemos ver tan poco durante el resto del año porque el día a día nos absorbe de forma implacable. Son tiempos de buena comida, la de toda la vida, la tradicional, la que hace la abuela, la que nos retrotrae al pasado, a la niñez. Son tiempos, también, de dar y recibir regalos, de ilusiones y sorpresas compartidas. En definitiva, de vivir momentos emocionalmente intensos. Y más en un año como este, en el que la pandemia nos ha tenido a todos desanimados y separados.
Quizá por eso, un regalo gourmet es una de las mejores maneras de demostrar nuestro cariño por alguien, ya que cumple con esas cosas que hacen de estas fechas señaladas un momento muy especial: comida para compartir con los tuyos. El catálogo de esas sorpresas que llegan envueltas en papel es infinito: desde piezas de queso artesanal y botellas de vino (las hay a precios asequibles para bolsillos con menos recursos) hasta productos de auténtico lujo para quien tiene el gusto, las ganas y el dinero para gastárselo, por ejemplo, en un jamón 100% ibérico de bellota, en una cesta a rebosar de delicatessen como patés, embutidos y caviar, o en un champán de altos vuelos. Pero insistimos: cuesten más o cuesten menos, lo bonito de estos regalos es que se pueden compartir en familia.
Pero la ecuación Navidades + Regalo Gourmet no siempre da como resultado la compra de uno o varios productos a los que hincar el diente o dar un trago. También pueden ser experiencias gastronómicas, y esas no tienen precio porque su valor es incalculable cuando se viven en compañía de los seres más queridos. Por eso las tarjetas Regala Windsor son una opción que siempre triunfa en estas fechas: ¿a quién no le gustaría comer o cenar en nuestro restaurante y redescubrir nuestra cocina catalana contemporánea, siempre fiel al recetario tradicional pero con un afinado toque de contemporaneidad?
Se trata de unas elegantes tarjetas regalo que se pueden adquirir en nuestro establecimiento en horario de servicio o bien on-line. En ellas, se puede dejar escrito un mensaje de felicitación a la persona destinataria, lo que hace que el obsequio sea aún más personal y emocionante. Como los gustos y los presupuestos varían según cada persona, en Windsor ofrecemos distintas experiencias para que los homenajeados no tengan que preocuparse de nada más que de disfrutar y pasar un rato agradable con su gente alrededor de una mesa. Al fin y al cabo, es la manera más típica y grata de disfrutar de las Navidades.
El menú gastronómico consta de un aperitivo en el bar, la tapita del chef, tres medios platos, pan de la Fleca Balmes, postres, carta de tés y cafés, entretenimientos para el café y aguas minerales; con el maridaje Windsor cuesta 85 euros y con el maridaje Premium, 105, ambos con el IVA incluido. El celebrado menú Mejores Creaciones va más allá al incluir un aperitivo en el bar, dos tapas del chef, cuatro medios platos, pan de la Fleca Balmes, pre-postres y postres, carta de tés y cafés, entretenimientos para el café y aguas minerales; con el maridaje Windsor cuesta 115 euros y con el maridaje Premium, 160, ambos con el IVA incluido.
También tenemos a disposición de los paladares más tradicionales el menú de Escudella. Se compone de snacks del bar, copa de cava de bienvenida, galet relleno de ‘pilota’ y trufa negra, sopera de escudella con galets, bandeja de ‘carn d’olla’ y verduras ecológicas, pan Masia de la Fleca Balmes, crema catalana o naranja al natural con avellanas, Priorat dulce y entretenimientos para el café. Su precio es de 55 euros.
Y si ninguna de estas cinco opciones acaba de convencerte, en Windsor podemos personalizar el ágape a tu medida y a la de los tuyos. Tan solo hay que escoger el importe que quieres regalar (el mínimo que recomendamos para dos personas es de 120 euros).
Así de fácil. Porque, en estas fechas, y sobre todo este año, se trata de disfrutar y olvidarse de todo lo demás.