Lucir un Sol Repsol es una de las mayores satisfacciones que el equipo de un restaurante puede sentir. Orgullo, alegría, felicidad… Y Restaurant Windsor no es la excepción. Ostentar una distinción tan prestigiosa está al alcance de muy pocos establecimientos en España, porque no es sencillo alcanzar los estándares de calidad de una publicación como esta. Para realizar su selección se basa en criterios muy exigentes, desde la cercanía y eficiencia en el trato al cliente hasta la calidad de los productos y su elaboración en los platos que salen de la cocina, pasando por el cuidado y la amplitud de la bodega.
Para que te hagas una idea de lo complicado que resulta aparecer en la Guía Repsol, en la edición de 2023, recién publicada, solo ha habido ocho restaurantes catalanes que han estrenado un sol (81 en España) y un par que han sumado el segundo (18 en España). Teniendo en cuenta que hay miles y miles de locales dando de comer en todo el territorio, es fácil comprender el tremendo mérito que significa lograr un entorchado.
Para Restaurant Windsor, es también un bonito reconocimiento al trabajo bien hecho. En definitiva, la confirmación de que estamos en la élite de la restauración. Y eso es una garantía de calidad para quienes vienen a visitarnos sin conocernos, porque tienen la seguridad, gracias a la guía, de que van a disfrutar al máximo de una comida o una cena gracias a un servicio de sala y una propuesta gastronómica (cocina catalana contemporánea que sublima el producto local) tan cuidados como el entorno en el que se encuentra el restaurante (un principal de arquitectura modernista íntimo en el que no falta un tranquilo y luminoso jardín interior).
Tener un Sol Repsol nos sirve, además, como acicate para querer mejorar todavía más, ya que supone un chute de energía poderosísimo, un refuerzo a nuestra idea gastronómica, a nuestra manera de trabajar, que nos indica que vamos por el buen camino. Un premio, en fin, que nos anima a seguir en la misma línea.